Xavier Miserachs: Cataluña a pie de calle

Reportero infatigable, ilustrado viajero y gran vividor, Xavier Miserachs formó parte de una generación de fotógrafos que revolucionó la imagen en España. Hizo cientos de reportajes desde París a Somalia, pero el centro de su fotografía y su vida fue siempre Cataluña.

Martes, 30 de Abril 2024, 14:37h

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Corría el año 1962 y Miserachs caminaba por la vía Layetana cámara en mano. Reparó en un grupo de jóvenes que iba lanzando piropos a las chicas. Los siguió un rato. De repente, uno de ellos increpó a una joven, que se sobresaltó. Disparó sin llegar a encuadrar, pero el resultado es ya un icono. No solo por plasmar lo inquietante del piropo –entre el halago y la agresión–, sino por la moderna composición de la imagen, en movimiento y con distintos planos. Puro instinto fotográfico.

La rambla 'moderna'

Miserachs fue el miembro más joven del grupo de fotógrafos catalanes encabezados por Francesc Català-Roca, Oriol Maspons, Ricard Terré y Ramón Masats. Eran fotógrafos inquietos y vanguardistas que apostaban por imágenes como esta de la Rambla, alejada de los cánones tradicionales.

Cadaqués 'in love'

Su fotografía tiene ecos del neorrealismo, como en esta foto de una boda en Cadaqués en 1965, pero lo que marcó su estilo fue la revolucionaria exposición The family of man en 1955 en Nueva York, un nuevo planteamiento de la imagen. Los fotógrafos Robert Frank y William Klein lo impactaron.

Una pose torera

Miserachs disfrutaba con la fotografía callejera, como esta en Sant Feliu de Guíxols en 1964. Solía hablar con sus improvisados modelos. Él y Maspons también salían a buscar chicas guapas para las portadas de las revistas, por las que les pagaban 25.000 pesetas. Y no pocas veces les servía a ellos para ligar.

El 'boom' del turismo

A principios de los años sesenta, España superó a Francia e Italia como líder del turismo mundial. Miserachs mostró siempre interés por las tipografías y los carteles en las playas y los pueblos de la Costa Brava. Llegó a publicarlas como un fotolibro, Costa Brava Show.

El ladrillo se comió las lechugas

En 1964 en la calle Guipúzcoa de Barcelona todavía había huertos, que pronto desaparecerían ante el espectacular desarrollo de la ciudad en los sesenta. Miserachs también documentó ese crecimiento, dentro de lo que un crítico calificó como «recorridos emocionales de la ciudad».

Sin complejos

Él decía «mis fotos no tienen tema, su lectura corresponde al espectador». Practicó una fotografía fresca, dinámica, sin complejos. Dejó unas 80.000 fotos, que sus dos hijas cedieron en 2011 al Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona.

Xavier Miserachs nació en Barcelona el 12 de julio de 1937, en plena Guerra Civil. Hijo de un hematólogo y de una bibliotecaria, llegó a estudiar cuatro años de Medicina, pero lo dejó para dedicarse a la fotografía. En 1952 se unió a la Agrupación Fotográfica de Cataluña y a los veinte años presentó ya su primera exposición. Tras el servicio miliar se profesionalizó y trabajó para numerosas publicaciones de la época. Como reportero cubrió desde el Mayo del 68 en París hasta la Primavera de Praga. Gran viajero él mismo, su destino favorito fue el África subsahariana, que recorrió casi en su totalidad. Su otra gran pasión –además de las mujeres, según cuenta Maspons, con quien compartía 'afición'– era la música. Llegó a ser DJ de la discoteca Bocaccio. Murió en 1998, a los 61 años, de un cáncer del pulmón.Xavier Miserachs Colección Photobolsillo. Editorial La fábrica